Los reclutadores buscan líderes que sean capaces de desarrollar el talento de sus empleados, lo que significa que pueda identificar y aprovechar las habilidades y cualidades únicas de cada miembro del equipo.

Para ello, el líder debe ser capaz de: 

Elaborar un inventario de los talentos y cualidades de los empleados, lo que puede ayudar a identificar oportunidades para mejorar su rendimiento y desarrollo profesional.

Debe analizar el conocimiento y la experiencia que se necesitan en el departamento o equipo para los próximos años. Esto ayuda a garantizar que el equipo tenga las habilidades necesarias para cumplir con los objetivos estratégicos de la organización.

Es importante que el líder sea capaz de distinguir talentos y les permita inscribirse en cursos de desarrollo gerencial. Esto puede ayudar a mejorar la capacidad del empleado para liderar equipos, tomar decisiones estratégicas y participar en proyectos importantes.

También debe permitir a los empleados preparar sus propios planes de desarrollo personal, lo que puede ayudar a garantizar que cada miembro del equipo tenga oportunidades para crecer y desarrollarse profesionalmente.

Es capaz de ofrecer a los empleados la oportunidad de ganar más experiencia a través de proyectos y rotación de tareas. Esto puede ayudar a mejorar su comprensión de diferentes áreas de la organización y fomentar una cultura colaborativa y dinámica.